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25 de julio de 2012

Texto

Un periodista le hizo una entrevista al Dalai Lama, al entrar en la habitación le preguntó:
¿Qué es lo que más le sorprende de la humanidad?
A lo que él respondió:
Que se aburren de ser niños y quieren crecer rápido, para después desear ser niños otra vez.

Que desperdician la salud para hacer dinero y luego pierden el dinero para recuperar la salud.

Que ansían el futuro y olvidan el presente y así no viven ni el presente ni el futuro.
Que viven como si nunca fuesen a morir y mueren como si nunca hubieran vivido...
Quedé en silencio un rato y le dije:
Pero, ¿cuáles son las lecciones de vida que debemos aprender?
Y con una sonrisa respondió:
Que no pueden hacer que nadie los ame, sino dejarse amar,
que lo más valioso en la vida no es lo que tenemos, sino a quien tenemos,
que una persona rica no es quien tiene más, sino quien necesita menos
y que el dinero puede comprar todo menos la felicidad...
Que el Físico atrae pero la personalidad enamora.
Que quien no valora lo que tiene, algún día se lamentará por haberlo perdido,
Y que quien hace mal algún día recibirá su merecido.
 Si quieres ser feliz, haz feliz a alguien.
Si quieres recibir, da un poco de ti, rodéate de buenas personas y sé una de ellas.
Recuerda, a veces a quien menos esperas es quien te hará vivir buenas experiencias!
Nunca arruines tu presente por un pasado que no tiene futuro.
Una persona fuerte sabe cómo mantener en orden su vida.
Aún con lágrimas en los ojos, se las arregla para decir con una sonrisa: 'Estoy bien'.

11 comentarios:

antonioe dijo...

precioso relato querida amiga. nos hace reflexionar, sobre todo en estos tiempos en que todo parece ir tan de prisa... un abrazo.

Isabel Martínez Barquero dijo...

Magda, cuánta, pero cuánta sabiduría en este texto. Las palabras del Dalai Lama son un manantial de agua fresca que apaga la sed, y es que los occidentales hemos perdido el norte en pos del becerro de oro. Nunca satisfechos, siempre ansiamos más, y se nos van los días descuidando nuestro máximo bien: el presente, así como las personas que están a nuestro alrededor.
Gracias por compartir. En estos momentos, palabras como éstas llenan de paz el espíritu.
Un abrazo.

Rosa de los Santos dijo...

Desde luego que si! feliz y hacer felices a los demás parece tan fácil... yo lo intento cada día , créeme !!!
mil besosss

magdalenacontreras dijo...

Estoy de acuerdo contigo Isabel.
Sólo perseguimos el poder, y el dinero, más y más, y no nos damos cuenta de los de alrededor.
Un abrazo.

magdalenacontreras dijo...

Tenemos que reflexionar, y mucho amigo.
Un abrazo.

magdalenacontreras dijo...

Creo que tenemos que hacer feliz a los demás, hay que seguir intentándolo¡¡¡
Un abrazo.

ion-laos dijo...

Nos pasamos la vida lamentandonos y echandole la culpa al otro sin ver la viga en el nuestro. Cuándo aprenderemos?

Besos.

Luján Fraix dijo...

Hay que ser fuerte para mantener el orden, cosa que no es fácil porque en este texto existen muchas verdades que a veces nos resulta difícil manejar.
Besos querida amiga.
Cariños y abrazos

MariCarmenblogs.com dijo...

Cuanta sabiduría, en verdad que es mucho por lo que debemos agradecer, que todo lo que se dá, se devuelve, que es mas feliz quien más dá, que hacer feliz a otro es nuestra propia felicidad.

Bellas reflexiones.

Maruja dijo...

Hola amiga, has conseguido llevar una poca de paz ami espíritu, gracias.Buena reflexión. Besoss.

ODRY dijo...

Y llevaba toda la razón.

Un besote.

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